Todo cambio

Tenía solo 10 años cuando mi padre estaba discutiendo con mi madre acerca de cosas que para mí en ese tiempo no tenían importancia. No tome esa discusión como algo que fuera afectar a mi familia y a mis hermanos. Terminaron de discutir y mi padre molesto se subió a su carro y se marcho. Pasaron los días y no regresaba, mis hermanos estaban muy molestos pero por mi edad nadie me explicaba que estaba pasando. Hasta que un día decidí dirigirme hacia mi madre y preguntarle:
¿Que pasa mama?
Nada, ¿por que preguntas?
¿Donde esta mi papa? ¿Por que mis hermanos están molestos?
Mi amor, hay veces que los padres dejan de llevarse bien y deciden seguir caminos diferentes para ser felices. Eso no quiere decir que tu padre te a dejado de querer a ti o a tus hermanos. Tu papa tomo una decisión para ser feliz y se le tiene que respetar.
¿Entonces se fue para siempre?
Si, el se marcho pero va a venir a verte todos los días.
Esta simple explicación me dejo desconcentrada, todo el mundo pensaba que por ser pequeña no sabia lo que pasaba a mi alrededor, pero mi única pregunta era por que mis hermanos estaban tan molestos. Mi padre en si no pasaba mucho tiempo con nosotros, por sus negocios se la pasaba viajando todo el tiempo, pero aun así lo extrañaba.
Un día llegue a la casa y unas cajas estaban en la puerta de la casa. Aparentemente alguien se estaba mudando. Me acerque a mi madre y le pregunte que contenían esas cajas, y me respondió con una voz muy baja y quebrantada que eran las cosas de mi padre que en unos momentos las iba ir a recoger. En la casa la partida de mi padre no era algo que se discutiera muy a menudo. Ya tenia tiempo que no vivía con nosotros pero ver finalmente que todas sus cosas ya estaban empacadas y que no iba a regresar con nosotros me desconcentro, al punto que unas lagrimas salieron de mis ojos. Mi padre jamás nos dejaría de apoyar moralmente, ni económicamente, pero verlo partir fue muy duro.
Los días pasaban y lo veía una o dos veces a la semana, me llevaba a comer, al cine, u otras atracciones. Aun así lo necesitaba el tiempo que compartíamos no era suficiente para remplazar horas de su ausencia. Un día por error escuche una conversación que no debería haber escuchado, pero el tema también me afectaba a mi y me quede detrás de la puerta escuchando a mi mama y a mi hermana.
El no tiene derecho a hacernos esto. Deja de llorar por el mama, el no merece tus lagrimas. Nosotros te necesitamos bien y para eso tienes que mejorar tu autoestima. Eres una mujer aun joven y bella y muy inteligente. Si mi padre no pudo ver tus cualidades y darte el lugar que te mereces el se lo pierde. Tu no tienes que estar así por el. Y la mujer por la que te cambio no vale la pena, ella un día lo va a dejar o le va a hacer algo mucho peor. Escucha esto mama tu no lo perdiste a el, el te perdió a ti.
Hija no tienes que hablar con tanto coraje acerca de tu padre, tu sabes que el es tu padre y los quiere.
Si, nos quiere cuando tiene tiempo para nosotros cuando no nos quiere ni siquiera nos habla por teléfono. Mama abre los ojos viene a vernos solamente una o dos veces a la semana o ni siquiera nos viene a ver en días. ¡El dinero no lo es todo!! Necesitamos de su compañía, de su cariño, platicar con el, discutir si es necesario pero no solo su dinero. Tu nos has dado todo tu cariño, comprensión y consejos cuando los hemos necesitado pero el. Mama no vale la pena que tú le llores.
No quise escuchar más, en mis oídos me retumbaban las palabras de mi hermana, no podía creer que mi padre allá abandonado a mi madre por otra mujer. Ese día entendí que ningún hombre merecía las lágrimas de una mujer. Solo tenía diez años cuando comprendí que el mundo podía ser cruel, pero también que uno tenía en sus manos la manera de ver las cosas y hacerlo un mejor mundo donde vivir. El nos había abandonado y dado la espalda pero no por eso yo o mis hermanos o mi madre no la teníamos que pasar llorando. Teníamos que salir adelante sin el. La vida es como uno la toma si uno se la pasa lamentando, todo el tiempo va a estar llena de lamentaciones y preocupaciones. Si uno toma la vida como lo que es algo hermoso y aprende uno a darle el valor que merece, uno es feliz y sabe apreciar cada pequeño detalle.